Mamá e hija son tan zorras que comparten el novio del adolescente.

Cuando esta madre descubre que su hija tiene problemas para satisfacer a su hijo, la mujer se preocupa mucho y decide ayudarlo. Él quiere que él aprenda a chupar pollas como Dios lo ordena y que también aprenda a mover su vagina correctamente. Es por eso que al final comparten el novio de la adolescente, porque la madre le dice que la mejor manera de enseñarle es mostrarle personalmente cómo follar como una buena prostituta. La madre está encantada de tener relaciones sexuales con el novio de su hija, porque es un hombre joven con una buena polla que la perforará como nadie lo ha hecho durante mucho tiempo.